[2000] CHACALTANA, Juan. Un análisis dinámico del desempleo en el Perú. Mimeo. Lima: Fondo de Investigaciones del Programa MECOVI; INEI, Marzo.

El desempleo es uno de los temas de debate más importantes en relación al mercado laboral peruano. A pesar de esta importancia, la discusión académica no ha llegado aún a niveles muy sofisticados y la mayor parte de los estudios desarrollados en nuestro medio se han concentrado en la descripción de este fenómeno.

Más aún, la mayor parte de las referencias disponibles se han concentrado en el análisis de la tasa de desempleo abierto, indicador estático de amplio uso internacional a nivel oficial. Sin embargo, para entender cabalmente las diversas variantes en relación al desempleo hay que tomar en cuenta la gran movilidad laboral existente en el mercado de trabajo peruano. En el presente documento precisamente se utilizan herramientas que permiten explorar la naturaleza fundamentalmente dinámica de este fenómeno. En particular se analiza las implicancias de incorporar la movilidad del status laboral de los individuos sobre los análisis del desempleo. Seguidamente, se realiza un análisis detallado de los flujos de entrada y salida del desempleo, prestando bastante atención al tema de la duración del desempleo. Para desarrollar este análisis se han utilizado diferentes bases de datos construidas en base a las Encuestas Nacionales del Hogares (ENAHO) que ejecuta trimestralmente el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). En particular dado que se necesitaba información dinámica, se utilizó datos de dos paneles: a) el panel de hogares conformado por los cuatro trimestres de 1996 y b) el panel de hogares construido uniendo los cuartos trimestres de 1997 y 1998. Adicionalmente, se utilizó información de la ENAHO 1997 III como soporte de cálculo de algunos datos relevantes para la discusión desarrollada.

Los principales hallazgos del estudio se pueden resumir en tres grandes temas: El análisis de dinámica del mercado de trabajo general revela que existe una gran movilidad en el status laboral de los individuos. En particular, se encuentra que las principales transiciones laborales observadas ocurren entre el empleo y la inactividad y no entre el empleo y el desempleo. Más aún, se encuentra que existen inactivos permanentes (un 20% de la PET) e inactivos temporales, siendo estos últimos quienes cambian frecuentemente de status laboral. Tomar en cuenta estas características del mercado laboral tiene importantes implicancias en el análisis de la incidencia del desempleo. La gran importancia de la inactividad plantea interrogantes conceptuales sobre la metodología de clasificación de la fuerza laboral y respecto a las posibles diferencias entre los desempleados y los inactivos temporales. Ante ello, se plantea que es necesario adecuar los instrumentos de análisis a un mercado cada vez más cambiante, ya sea incorporando eventualmente la medición de la PEA habitual que toma como período de referencia un plazo más amplio, o analizando la posibilidad de incorporar encuestas continuas que cubran todo el año para tener una visión completa de todos los eventos que ocurren en el mercado de trabajo.

Es importante también el análisis de los flujos de entrada y salida al desempleo. Las personas que entran al desempleo pueden provenir del empleo o de la inactividad, y cuando vienen del empleo puede ser por razones involuntarias o voluntarias. Se encuentra que los despidos y las renuncias explicarían – cada una – un 20 % del total del desempleo. Los aspirantes representan sólo uno de cada 10 casos de desempleo, lo cual constituye un cambio respecto a décadas anteriores. En el caso de los flujos de salida del desempleo se encuentra que muchas personas, aproximadamente la mitad, dejan el desempleo porque se convierten en inactivas y no porque encuentran trabajo. Esto tiene importantes implicancias para el análisis de la duración del desempleo.

El análisis de la duración del desempleo indica que la duración esperada promedio es baja si nos referimos a la duración incompleta (unas 12 semanas), pero la que duración completa es mayor (18 semanas y media). El análisis econométrico que se realiza indica que la duración del desempleo muestra dependencia positiva para el caso de las salidas a la inactividad y dependencia unitaria con respecto a las salidas al empleo. Es decir, mientras más tiempo se está desempleado el riesgo de salir a la inactividad crece mientras que el riesgo de salir al empleo permanece prácticamente inalterado. En otras palabras, las ofertas de empleo arriban a una tasa constante lo cual puede llevar a la existencia de concentración del desempleo. En otras palabras, la idea que la duración del desempleo es corta porque los empleos se crean y destruyen muy rápidamente, no sería suficiente para explicar las diferentes situaciones que se producen en el mercado de trabajo ya que una parte significativa de los episodios de desempleo terminan en inactividad.